Este emprendimiento social iniciado en 1984, ante la creciente problemática de los menores en situación de vulnerabilidad, en consumo de sustancias psicoactivas, explotación sexual, exposición a la violencia convertidos en infractores hace que en 1993, la Oficina de Asuntos para Narcóticos y de la Aplicación de la Ley del Departamento de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica, con el respaldo de la Organización Panamericana de la Salud, aprueban el Proyecto de Comunidad Terapéutica de Puertas Abiertas para Niños de la Calle presentado por el Instituto Mundo Libre, con el propósito de rehabilitar a los niños y adolescentes consumidores de sustancia psicoactivas, promover su reinserción escolar, capacitación ocupacional y finalmente la reinserción social del residente reincorporándolo a su familia o que se desenvuelva independientemente.
